Tipos de lona para toldos

Hay distintos tipos de lonas que podemos emplear para nuestro toldo. Todas tienen sus ventajas y propiedades, y, dependiendo del tejido, serán más o menos resistentes al paso del tiempo, protegerán en diferente grado del calor y tendrán mayor o menor impermeabilidad.

La primera es la lona acrílica, compuesta por fibra acrílica, cuyo color proviene del mismo hilo que la forma, por lo que son muy resistentes al paso y al efecto de la luz. Por ello, el color dura más tiempo. Además, suelen ser impermeables y anti-manchas, y cubren bastante bien del viento. Este tipo de lonas son de las más estéticas y se emplean sobre todo en los toldos de brazos invisibles. Por último, con un simple cepillado con agua templada podremos mantenerla.

Por otro lado tenemos las lonas de vinilo, que son de tipo plasticoso, por lo que resultan totalmente impermeables. Además, es un tejido muy resistente y flexible y, como una de las principales ventajas, es muy sencilla de limpiar.

Una opción muy empleada es el poliéster tejido cubierto con PVC, pues es muy resistente al paso del tiempo, proporciona mucha sombra y presenta una alta protección frente al moho y a las manchas.

Por su parte, las lonas de PVC tienen mayor durabilidad, pues van soldadas en vez de cosidas. Su principal propiedad es la impermeabilidad.

Por último, tenemos las lonas de tejidos microperforados, que son mucho más modernas y están compuestas de una estructura de hilo de poliéster o fibra de vidrio recubiertos con PVC. Su principal ventaja es la capacidad de aislamiento térmico (reducen el factor solar al 0,06) y disminución de calor por su alta transpiración. Además, son tejidos traslúcidos por lo que no impiden la visibilidad.